Hasta ahora he estado hablando de los seres queridos que ya han partido. Sabemos que ya no están aquí, se encuentran en la luz, llenos de amor y paz. Pero, ¿y nosotros, cómo estamos ante su marcha?.
La pérdida de un ser querido siempre es dura, dolorosa y deja una huella importante, a veces una herida profunda que tarda en sanar y que con el tiempo puede acabar siendo una cicatriz.
Cada muerte se vive de manera distinta, su dolor no es el mismo. Puede depender del grado de vinculación o sentimientos que nos unían a la persona fallecida, a su manera de morir, si era un enfermo cómo ha llevado la enfermedad, el grado de sufrimiento que ha tenido, la edad en que ha muerto, etc. No es lo mismo, una persona mayor, que un adulto, un joven o un niño.
Aunque sintamos mucho su pérdida, asumimos con mayor naturalidad la marcha de las personas ancianas. Han tenido una vida rica en años que conlleva vivir experiencias, tiempo para amar, aprender, ser, querer; en definitiva, vivir.
El adulto, también ha tenido un cierto recorrido en años de vida, ha tenido oportunidades de saber, aprender y conocer, de amar y ser amado. En cambio, un niño o joven, trastoca. No tiene lógica, apenas ha tenido tiempo de vivir, de tener vivencias. Solemos decir que tenía una vida por delante. Podemos sentir frustración e ira ante su partida.
La muerte no tiene lógica, al menos no la nuestra. Pensamos que los últimos en morir no deben ser los más jóvenes. Sin embargo, no es así. Todos conocemos o hemos vivido experiencias en que son los más jóvenes los primeros en partir.
Las pérdidas tan duras, sea cual sea la edad del fallecido, muchas veces no son fáciles de llevar, ni de integrar. Nos sentimos vacíos, abandonados, rotos por dentro, la vida carece de sentido, ya no se lo encontramos. Nos hundimos, nos bloqueamos, estamos deprimidos. Nuestros amigos o conocidos no entienden nuestro dolor, nuestra pena y, eso provoca que algunos de nosotros se acaben aislando.
Vivir el duelo, es vivir el dolor, es vivir el sufrimiento por la pérdida e ir adaptándose a ella de la mejor manera posible. Esta vivencia es personal e intransferible. No hay dos iguales.
Hay duelos que se pueden hacer en vida. Por ejemplo, cuando conocemos la gravedad de un enfermo, aunque no sepamos la fecha de su partida. Podemos vivir estos momentos para prepararnos para su marcha. Tenemos un tiempo corto y precioso, y debemos aprovecharlo para poder despedirnos de nuestro familiar, tenemos la gran oportunidad de dejar todo en claro y en paz. Tal vez, no haya que decir nada, salvo te quiero. A veces, sólo se trata de estar ahí, en silencio, de tocar y acariciar, y de dejar partir.
Indudablemente el que sepamos que hemos hecho todo lo que estaba en nuestras manos, ayudará a que la sensación de pérdida siga estando pero que el dolor pase más rápidamente. Así, tendremos un duelo más suave y tranquilo.
En cambio, otros duelos son dolorosos. Hay quienes no quieren o no pueden darle la vuelta a la situación. Se aferran o enganchan a este dolor que les mantiene aparentemente vivos. Su vida, es vivir en el recuerdo permanente del ser que ha muerto. Se niegan avanzar hacia delante, se sienten culpables de seguir viviendo, o deciden que al partir su ser querido, la vida ya carece de sentido. Cada persona lo vive de manera distinta.
Cuando seamos conscientes que el duelo, que la situación que estamos viviendo nos puede, nos limita, bloquea, etc, sería adecuado ponernos en manos de personas especializadas que nos ayudarán a salir adelante, terapeutas que nos pueden ayudar a sobrellevar el dolor y a entender en qué fase estamos o qué es exactamente lo que estamos viviendo y su porqué. Nadie dice que sea fácil. Está en nuestras manos, el poder tomar un rumbo u otro y todos son respetables.
También existen grupos de apoyos, de personas que viven la misma situación de pérdida de un ser querido. Y hablar de nuestro dolor a personas que saben por lo que estamos pasando, puede conseguir que nos sintamos arropados, comprendidos y sintamos libertad para hablar de nuestro sufrimiento y pena.
Cuanto más nos preparemos, cuánto más sepamos a lo que nos podemos enfrentar, tendremos más recursos para salir adelante, haciendo que una situación de angustia lo sea menos y más llevadera. La herida estará ahí, no desaparecerá el recuerdo ni el amor que sentimos por nuestros seres pero podremos vivir con cierta alegría, disfrutando del resto de los días que nos queden hasta poder reunirnos con ellos.
La foto está sacada de internet y desconozco quién es su autor.
53 comentarios:
Hola María Eugenia:
Por supuesto, la muerte de un familiar es siempre dolorosa.
Cuanto más sepamos de la muerte más nos ayudara a sobrellevar el dolor. Su recuerdo debe ir con nosotros, porque mientras lo recordemos estará vivo en nosotros.
Un beso.
Hola Juan Antonio
Sí, la muerte y la vioda van juntas de la mano. Toda preparación es poca para vivir un momento duro, pero lo llevaremos mejor si estamos preparados para afrontarlo.
Sí, ellos seguirán vivos en nuestro recuerdo y corazón.
Besotes.
Hola Maria eugenia, has cambiado el enfoque de tu blog o ando algo despistada? muy interesante los temas que tocas y cierto lo que comentas en esta entrada,creo es cuestión cultural, venimos arrastrando todo lo que nos han inculcado, y mal interpretado. Gracias , que estamos despertando y preparándonos en todos los campos que nos hacen pensar que las cosas son diferentes , algo natural que hemos de admitir aunque cueste y prepararnos para cuando llegue ese momento, viviendo el presente conscientemente
Un abrazo y gracias por compartir
Muy buena tu entrada,amiga.Es bueno ser conscientes de lo importante que es prepararnos,aceptarlo,tener confianza en que ellos parten al cielo y tener calma,aunque el dolor sólo lo cura el tiempo.
Mi gratitud por tu cercanía y mi felicitación por tu naturalidad sencilla y profunda,amiga.
Mi abrazo inmenso siempre.
FELIZ FIN DE SEMANA.
M.Jesús
Hola Arianna
No, no he cambiado el enfoque del blog. Ha sido el mismo desde que nacíó hace ya dos meses largos.
Quizá te confundas con el otro blog. http://memandalas.blogspot.com/ Mandalas, Espacio Abierto, que sigue existiendo :D.
Es posible que sea algo cultural o simplemente el miedo a la muerte. Si cierro los ojos y no lo veo, es que no existe ;).
Besotes.
Hola Majecarmu
Es cierto, el dolor sólo lo cura el paso del tiempo siempre y cuando lo queramos hacer ;).
No es fácil llevar la pérdida de un ser querido pero si no podemos hacerlo sólos podemos contar con la ayuda de otras personas que ya han pasado por la misma situación o expertos en el tema.
Debemos vivir y seguir con nuestra vida, pese al dolor y la pérdida y encontrar el sentido a nuestra existencia a partir de nosotros mismos.
Gracias por tus palabras.
Besotes.
Yo pienso en que somos energía que van a estar a mi lado en todo momento, pero el mal rato cuando se produce el momento, no hay quien te lo quite. El duelo es un proceso natural que hay que pasar, creo.
Buen finde, besotes.
Hola
Opino lo mismo que tú. Pasamos por muchos duelos a lo largo de nuestra vida, pero los de la muerte de un ser querido son los más dolorosos.
Es sano pasar el duelo. Otra cosa, es cómo lo vivimos y ahí si que podemos prepararnos para lleverlo de la mejor manera posible.
Besotes.
Tiene que ser una dura prueba pasar por algo asi. Gracias a dios no puedo opinar porque no he tenido cerca una muerte importante. Leyéndote parece todo mas fácil. Cuando me vea e la situación, volveré a leerte. Gracias por tus consejos. Un bessito cielo
Querida amiga, me alegra estar de vuelta de nuevo, necesitaba un descanso y parece que funcionó...más salud, más sol, más vida...hoy hablas de la muerte, sin duda causa dolor, es evidente ante la pérdida de un ser querido, y es bueno sacarlo fuera, que no se enquiste dentro de nosotros...
Perdí a mi abuelo hace unos 20 años, parece ayer...siempre está presente en mi vida, veo una puesta de sol y me acompaña, miro el campo de naranjos y se que allí está una parte de su esencia, poco a poco, aquel dolor se evapora y da paso a recuerdos y momentos que han dejado huella en esta vida, formando parte de la vida...al final el volvió a su origen, la tierra. Y allí volveremos todos para seguir el ciclo de la vida.
Solamente espero no ver la muerte de un niño, no se cómo lo afrontaría...supongo que mi refugio sería la familia, pero es un tema difícil de tocar, espero que no llegue, no verlo...
Mil abrazos cielo.
Siempre se sufre pero es parte de la vida enfrentarse a esas situaciones,un beso grande!
uff...dificil tema...
creo que nunca podemos estar preparados apra perder a un ser querido...
quizas entendamos la perdida de un padre por ejemplo...pero jamas podemos entender la de un hijo....
sea como sea... la vida siempre continua aunke algunos se queden en el camino...
es dificil aprender a soltar...
un abrazo
Hola Ion preciosa
Me acabado de dar cuenta que no te he saludado en el comentario, sólo he puesto Hola. Perdón, por el despite.
Besotes.
Hola Men
Espero que tardes mucho, muchísimo tiempo en vivir una situación de duelo por la pérdida de un ser querido.
Duelos vivimos todos los días, perdemos parjeas, trabajo, enfermedades, cambios de ciudad, de casa, etc. A esos estamos más acostumbrados.
La teoría siempre parece más fácil, aunque cuando nos ponemos a practicar a veces nos sorprendemos porque lo hacemos genial ;).
Besotes.
Hola Remei
Qué bie verte de vuelta. Son buenas noticias. Me alegro mucho.
Si conozco a personas que han perdido a bebes y es muy duro.
Creo que es difícil prepararse para la muerte, pero de algún modo es necesario que estemos atentos, porque a todos nos va a llegar el momento. A pesar de estar más o menos listos, seguirá siendo dura.
Me ha gustado mucho lo que has contado de tu abuelo. Ya lo he visualizado, los naranjos, tú, tu abuelo, transmites paz. Es precioso.
Besotes.
Hola Cami
Si que lo es, y cuanto más concienciados estemos, mejor lo llevaremos. Aunque el dolor siga estando ahí, tendremos más recursos para salir adelante.
Besotes.
Hola Firenze
Sí, los apegos y desapegos son muy fuertes en todos nosotros. Vinimos sólos y partiremos sólos.
No es fácil afrontar la muerte de un ser querido, no lo es, pero si es posible vivirla desde un enfoque menos doloroso. Eso no significa que estemos o seamos fríos ante la muerte, sino que sepamos afrontarla mejor.
Lo de los niños es duro, si. Lo viví de cerca, a través de una conocida.
Besotes.
Nos enseñan apego y vivir rápido, cuando la vida es desapego y hacer duelos, no sólo por la perdida de un ser querido, los duelos son necesarios para ir pasando etapas y madurar, tomandonos el tiempo necesario.
Besos.
YO EL DUELO DE MI MAMÁ LO HICE EN VIDA DE ELLA Y LUEGO TAMBIÉN Y HASTA HOY NO LO HE PODIDO SUPERAR PORQUE NO ACEPTO LA MUERTE. MENOS DE ALGUIEN JOVEN, ES ALGO QUE ME SUBLEVA, QUE ME DA UNA TERRIBLE IMPOTENCIA Y QUE LUEGO ME PROVOCA PIEDAD Y TRISTEZA.
NO SIENTO ANGUSTIA POR LOS QUE QUEDAN SINO POR EL QUE TIENE QUE PARTIR, SIEMPRE ME HA PASADO...
HE VIVIDO MUCHAS MUERTES EN MI FAMILIA Y ME HAN MARCADO PARA SIEMPRE. ME DUELE EL QUE SE VA... NO SÉ.. PORQUE LO SIENTO TANTO PORQUE OTRAS PERSONAS NO SON ASÍ.
BESOS GIGANTES.
PD HE IDO A PSICOLOGOS MUCHO TIEMPO EH? PERO NADA.
Vivimos mientras nos recuerden, a través de dolor sentimos, pensamos, razonamos, recordamos y soñamos.
Un abrazo
Impresionate post. Tengo a mi alrededor muchas personas en esta situación y como dices cada cual la asume de diferente manera.
Bss
Hola Autoconocimiento
Sí, constantemente estamos viviendo duelos y pérdidas que nos ayudan en cierta manera a vivir el gran duelo.
Besotes.
Hola Luján
La muerte de alguien joven siempre duele más, pero por mucho que no queramos verlo, no significa que no vaya a ocurrir.
Me parece que es necesario aceptar la muerte como un hecho que va a suceder aunque no nos guste. Mientras esto no se de, los duelos siempre serán complicados y duros.
Los psicólogos te podrán aconsejar, apoyar y guiar pero quién tiene que cambiar, si así lo desea, es cada uno de nosotros. Es un trabajo personal y profundo.
Besotes.
Hola Adrián
Por supuesto, mientras nos recuerden estamos vivos pero no siempre tiene porque ser a través del dolor. Se puede hacerlo desde la templanza, la alegría, la melancolía, la culpa... elegimos el modo de hacerlo.
Pero hacerlo desde la alegría no supone que nos olvidemos de ellos. Es sólo otro enfoque.
Besotes.
Hola Katy
Sí, todos lo vivimos en función de muchos factores, de el apego a la vida, a la persona, del miedo a la muerte, de la religiosidad, de la transcendencia personal, del sentimiento .....
Lamento que en tu entorno haya muchas personas viviendo estos momentos tan duros.
Besotes.
Querida Mª Eugenia:Acabo de leer tu entrada y me he visto reflejada en ella, mis lágrimas resbalan por mis mejillas y he sido incapaz de contenerlas.
Te mentiría si te dijera que no me siento mejor, pero la huella que mi madre ha dejado en mí, es tan profunda, que me temo que tendrá que pasar mucho tiempo hasta que yo pueda hablar de ella sin que se entristezca mi corazón.
Unas personas somos más sensibles que otras, o dicho de otra manera, afrontamos mejor o peor las adversidades que la vida nos da.
Mi conciencia está tranquila, tanto, que volvería a repetir los mismos cuidados, los mismos cariños y todo el tiempo de día y de noche que le dediqué.
Abandoné un poco a Anthony, pero él es buena persona y lo entendió, por ello también le tengo que estar muy agradecida.
Mi duelo, quizá se prolonga,pero el escribir en mi blog y dejar via libre a mis sentimientos, me ha ayudado mucho.
Para completar, tengo a mi alrededor unos amigos virtuales maravillosos y, pese a no conocerlos, yo reparo solamente en sus sentimientos, en la nobleza de sus corazones y eso es suficiente para sentirme arropada y recompensada.
A ti, por esta entrada y por tu ayuda, tengo que darte doblemente las gracias.
Un fuerte abrazo al corazón.
Kasioles
Hola Ma. Eugenia querida amiga.
como siempre comentas un tema muy interesante y con mucho dereflexion sobre el mismo, El duelo ante la perdida de un ser querido.
yo he pasado por varios el primero fue el de mi padre adoptivo, yo tenia 14 años fue algo muy difícil para mi de superar pero logre asimilarlo cuando me di cuenta de la realidad de la vida y la muerte y que de ahí tenia que continuar mi camino sin el junto a mi, solo en mis recuerdos que son muchos y muy hermosos,marco mi vida el fallecimiento de mi padre.
después fue mi madre adoptiva,y mi madre biológica para entonces ya había asimilado que tenia que existir la muerte que se cerraban ciclos de vida y tomaba las cosas con mas serenidad, pero no contaba con que en el mismo año y aun mes de retirado cada uno iba a perder a mi hermano mayor y a mi hija, eso me movió el piso y sacudió mi mundo, hoy estoy en el proceso de asimilarlo y entender que debo continuar sin mi hija y sin mi hermano,es difícil pero se que no imposible que tengo días nublados por la tristeza pero cada día hay mas días de luz y sol en mi vida, con un rinconcito de sombra y tristeza que seguirá acompañando los días de mi vida.
Gracias por compartir temas muy interesantes, un besito y mi eterna gratitud a ti.
Hola Maria Eugenia...creo que deberia ser una Ley de vida que se fueran primero las personas grandes que los jovenes o los pequeños..pero tienes toda la razòn, la muerte no elije si son chicos o son grandes..y creo que nùnca se està lo suficientemente preparados para un duelo familiar.
Buen domingo.
Besos.
Hola Kasioles
Lamento que esta entrada te haya afectado tanto y te haya hecho llorar.
Cada uno afrontamos el duelo como podemos, dependiendo de nuestras capacidades, sentimientos y herramientas a nuestro alcance.
Es estupendo que la huella de tu madre siga estando presente en tu vida de una manera tan fuerte, que su amor siga estando a tu lado y tú puedas sentirlo.
El escribir el blog, y de manera tan especial como lo haces es una maravilla; recbir el apoyo de la familia y amigos es bueno y siempre ayuda, pero la labor es personal.
Cuando el duelo termina, la relación con nuestros seres queridos permanece pero de otra manera. Siguen velando y guiándonos pero sin estar atados.
Gracias por lo que dices de mi.
Besotes.
Hola Atlántida
Qué te voy a contar yo sobre duelos, dolor, pena y sufrimiento. Sólo puedo callarme llena de respeto y en silencio aprender de ti, de tu actitud y valentía.
Mil gracias por compartir algo tan íntimo con todos.
Besotes.
Nos ayudas mucho María Eugenia con tus entradas. Por supuesto que es el tema mas desgarrador porque en todo tienes razón pero por mucha fuerza interior que poseas superar por ejemplo la muerte de un hijo, de un infante, de un adolescente es muy muy fuerte. Porque te cuestionas el motivo de su marcha, como puede haber realizado sus objetivos si no ha tenido tiempo.
En fin que sea dentro de mucho tiempo el que tenga que despedir a los míos.
Un abrazo lleno de mi mejor energia para ti cariño. Be sitos. Amelia
Hola Diazul
No, nunca estamos realmente preparados para nada, especialmente para afrontar la muerte de un ser querido. En cambio, si que podemos acercarnos a cómo podemos llegar a vivirlo, a sentirlo y de esta manera, poder tener un duelo más llevadero, menos traumático.
Besotes.
Hola Amelia
Desde luego, que pase mucho tiempo y muy largo antes de vivir una muerte cercana, y que no tengas que vivir nunca la pérdida de ningún niño cercano.
Sí, te cuestionas muchas cosas y posiblemente, la mayoría de ellas quedan sin respuesta. Conozco a varias personas que han vivido la pérdida de un hijo y en general, se lleva muy mal, pero un día le dan la vuelta. Eso no significa que no se acuerden de él, pero si de otra manera.
Nos queda mucho por aprender, pero en principio, tenemos mucho tiempo por delante :D.
Besotes.
Hola a Todos;
Qué bien hablar de la bendita y maldita muerte a mi me toco la partida de mi pareja suceso que como mencionan hizo temblar todo en mí, lo grande se hizo pequeño los caminos ya no tenían ruta y la lógica se ausento el fue asesinado por robarle el auto, en un segundo todo se convirtió en un ¿por qué? ¿A mí?, ¿a el?, ¿a nosotros? no hubo respuestas, al menos no inmediatas.
El laberinto del duelo ha sido largo para mi, lleno de la más oscura tristeza y también de grandes milagros que iluminaron mi mente y me hicieron vivir un día a la vez, perdiendo miedos ganando otros, llorando a mares, riéndome de los recuerdos maldiciendo más por que se acabo, al menos aquí. En medio de todo eso se tiene que tomar una decisión la mía fue relativa a lo que éramos el y yo -vida- ya que la muerte es un terreno llano para quienes nos quedamos aquí se encuentra la ventaja de que se puede construir levantar castillos sobre las cenizas del dolor, vengar este revés de la vida con lo inesperado; ser feliz.
Hoy a casi cuatro años de su partida mi cuerpo y mente se encuentran experimentando la vida retirando la culpa de haberme quedado aquí, de sonreír, de realizar y de volver amar. La muerte aunque arrasa también aporta y lo indeleble su amor ese nunca se ha ido y se ha hecho presente en todo lo que hago. ¿Extrañarle? si a diario solo por su cuerpo, en todo lo demás ya aprendí que las personas que amas jamás se mueren si las mantienes en tu corazón la ausencia no existe.
Abrazos.
Hola MARÍA EUGENIA
Este tema generalmente ocasiona mucha resistencia a ser tratado, pero como dices es necesario estar preparado. Sin embargo siempre nos afectará cuando el que se va es un ser querido, aunque cuando hay comprensión sobre lo que pasa cuando la persona muere, lo podremos aceptar con mayor naturalidad a pesar del dolor que esto significa porque sabemos que el que se fue está bien, los que quedamos mal, somos nosotros. Muchas veces me pongo a pensar que en realidad el dolor es por nosotros mismos, porque nos quedamos solos, porque no veremos mas a esa persona, por que lo sentimos como un abandono etc.
En fin un tema que da para mucho.
Gracias por tocarlo.
Un abrazo
Ha sido una delicia leerte María Eugenia..
Un beso de corazón
Hola Yen
Es una prueba muy dura la que has pasado y como dices, el duelo no es fácil. Mil preguntas que a veces no tienen respuesta, la culpa por haberte por seguir viva....
Enhorabuena por haber aprendido y transmutado el dolor en alegría, y en ganas de seguir viviendo.
Es lógico que te acuerdes de él todos los días de tu vida. De su amor, de vuestra vida pero eso no te impide seguir adelante y poder volver a encontrar otro amor. Será distinto, pero por qué no, estupendo.
Mil gracias por compartir tu historia. Me ha gustado mucho y es preciosa tal y cómo la has contado, tal y cómo lo has vivido.
Enhorabuena por todo.
Besotes.
Hola Carmen Rosa
Estoy de acuerdo contigo. Todos estamos apegados y más a los seres queridos.
También me he planteado, especialmente en duelos duros y largos, qué es lo que realmente hay debajo de esa situación tan compleja.
Sabemos que ellos están bien, que están en la luz, pero nosotros, desde nuestro dolor nos aferramos a ellos, a veces sin dejarles partir.
Desde luego que no todos los duelos son iguales y por mucho que nos preparemos, hay que pasar el dolor por la pérdida.
Sí que es un tema que da mucho de si. Y que cuanto más hablemos de ello, quizá sirva para abrir la mente y empezar a ver la muerte como lo que es, una transición, un paso natural de la vida para volver al origen.
Gracias por tu reflexión. Me ha gustado mucho.
Besotes.
Hola Lía
Muchas gracias, por tus palabras. Me alegro que te haya gustado la entrada.
Besotes.
Yo no tengo cerca ninguna pérdida importante, pero me mentalizo cada vez mas que las personas que se nos van, no lo hacen por completo...están más cerca de lo que pensamos, y eso me tranquiliza para un futuro.
Somos pura energía, y como tal, no desaparece, sólo cambia de plano.
Un besote enorme y perdoname por ir siempre con retraso.
Me alegra poder conocer esta tu casa , a través de la visita a la mia. Un fuerte abrazo.
Hola Metamorfosis
No tengo nada que perdonar, al revés sólo agradecerte tu presencia, tu apoyo y ánimo constante y es todo un honor para mi.
Es verdad, somos energía y como comentas, nos transformarmos al morir, cambiamos de plano. Seguimos viviendo pero de otra manera.
Besotes.
Hola Magdala
Se bienvenida y espero que te sientas a gusto aquí.
Besotes.
Gracias por estos valiosos consejos. Un beso.
Hola Susana
Gracias a ti. Me alegro que te haya gustado la entrada.
Besotes.
Siempre es un dolor la perdida de un ser querida..
Con el tiempo pasara ese dolor a un recuerdo , pero siempre doloroso..
Un abrazo
Hola J Valentina
Sí, la muerte de un ser querido es dolorosa pero ese dolor puede ser más llevadero o traumático. El estar preparados para vivirlo hará que el duelo sea menos doloroso. Eso si, vivir un duelo bueno, no significa que no vayamos a sentir dolor por la pérdida. Pero si que entendamos que la muerte forma parte de la vida.
Perdona por la respuesta tan larga.
Besotes.
Perdí a mis padres y al único hermano, seguidos. Me quede sólo de aquella familia. Tengo una esposa y una hija. Pero cuando estoy en la casa de mis padres, me viene una pena inmensa y no puedo evitar llorar en silencio yo solo.
Fuí el hijo mayor, y me tocó tomar la responsabilidad de cuidar a mis padres y hermano hasta que la muerte se los llevó. A veces, siento culpabilidad, de tal vez haberles tratado con despotismo en momentos difíciles para mi. Fueron momentos que me oprimian con tanta responsabilidad, y a veces para hacerles cumplir con los tratamientos , me puse "agresivo". Me duele el alma.
Hola, Anónimo
¿Cuál es tu nombre?
Me imagino que la sensación de vacio será grande. Aunque ya no están en el plano físico, estoy segura que te acompañarán allí donde vayas.
Llorar no es malo, siempre que te ayude a aliviar la pena y a "sacar· todos los sentimientos que están dentro. Llorar es expresar, comunicarse.
Besotes.
Hola, Anónimo
Por favor, si os identificáis se con quién hablo. ;)
Todos somos responsables de nuestros actos. Puedes hablar con tus seres queridos, desde el corazón y puedes decirles lo que deseas que sepan. Te escuchan.
Besotes.
Hola yo sueño mucho con mi padre siempre me dice que o está bien porque yo no paro de llorar lo he notado varias veces ..el otro dia soñé con el y se limpiaba una lagrima mientras yo lloraba y le decia que lo quiero mucho pero que me hace mucha falta va hacer 2 años q s fué... la verdad cuando m despierto sé que he estado con el y lo paso mal que esté mal por mi culpa
Hola Amparo,
Si te dice que está bien, ¿por que crees que no es verdad lo que te cuenta?
Besotes.
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